El festival alegre
Cuando mi familia emigró de Japón para instalarnos en Argentina yo tenía dieciséis años. Mi papá era gerente de alto rango en una petrolera y nos vinimos a vivir acá. Recuerdo que el contraste cultural fue inmenso y se me hizo muy difícil acostumbrarme al cambio. Sin embargo, esta historia no es sobre mí ya que no creo que una mudanza pueda ser interesante. Fallan algunos escritores en pensar que la historia que escriben es la que quieren escribir. Uno escribe la historia que se debe contar. Esta historia es sobre un maestro que tuve en la escuela primaria, allá en Japón, llamado Kei san. En realidad, Kei san nunca fue mi maestro de clases. Cuando yo era chico él enseñaba en grados más altos, y cuando llegué a grados más altos él enseñaba en secundaria, y cuando llegué a secundaria él ya no trabajaba en el aula. A pesar de esto, fue mi maestro durante todos esos años. El maestro Kei san se distinguía del resto de los docentes de la escuela a la que yo iba, y más adelan...